Escaleras

El acero y el aluminio son los dos materiales más utilizados en la construcción de escaleras. Pero el aluminio ofrece muchas características que no tienen comparación con otros metales, lo que lo hace ideal para el uso en el lugar de trabajo e incluso a modo particular.

¿Porqué elegir aluminio?

La mayor diferencia entre el acero y el aluminio es el peso. El acero es 2.5 veces más denso y pesado que el aluminio. Esto significa que las estructuras de aluminio serán más fáciles de manejar y menos caras de enviar.
Otras diferencias significativas incluyen:

  • Fuerza. El aluminio tiene una alta relación resistencia-peso; su masa y peso es aproximadamente 35% la del hierro y 30% la del cobre. Es más maleable y elástico que el acero.
  • Maleabilidad. Se pueden obtener formas complejas en una pieza evitando así los métodos de unión mecánica. Esto hace que los componentes de la estructura de la escalera sean más fuertes y menos propensos a aflojarse con el tiempo.
  • Resistencia a la corrosión. Uno de los mayores atributos del aluminio es que es naturalmente resistente a la corrosión sin tratamiento adicional. No se oxida. Esto se debe a la presencia de una fina película protectora natural de óxido de aluminio que se adhiere a su superficie. Por lo general, el acero debe pintarse para protegerlo del óxido y la corrosión, especialmente si se va a usar en un ambiente húmedo o húmedo. El aluminio se puede usar sin ningún revestimiento de acabado o pintura, pero puede pintarse o revestirse si se desea.
  • Incombustible. El aluminio no se quema, incluso a temperaturas extremadamente altas, no produce humos tóxicos.
  • Reciclable. El aluminio se puede reciclar de manera repetida, rápida y rentable sin perder ninguna de sus características. El reciclaje de aluminio utiliza menos energía y puede ofrecer importantes beneficios de costos.